12/11

 Me enfoque en dejarlo pasar, que el que ya no estés no sea un dolor, sino un avance para ser mejor. 

Venia bien, perfecta. Tanto como para en el pedestal ponerme a reinar solo a mí.
Pero casi cerca de las doce, mi cuerpo comenzo a extrañarse y en mi cabeza millones de recuerdos lograron despertarse.
La emoción por la sorpresas, las cartas y todo el amor queriendo expresarte, sin contar los te amo, las videollamadas con noches de peliculas hasta la madrugada y las canciones que solía dedicarte...
¿Cómo es que ahora no hay nada?
Extraño verme enamorada, extraño poder desearte todo lo mejor y emocionarme por tu cumpleaños. Pero para mi suerte, ya decidiste hace rato y me perdiste por giladas. 

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